Buscando la
Cara del Señor
Las cartas de los alumnos indagan sobre la vocación del arzobispo
Recientemente recibí un paquete de cartas de los alumnos de la escuela secundaria St. Rose of Lima School en Franklin.
En la clase de Lenguaje se asignó a los estudiantes la tarea de buscarme por Internet y escribirme una carta amistosa. Un estudiante averiguó que “[leo] todas las cartas recibidas” y esperaba que hiciera lo propio.
Se me formularon muchas preguntas sobre qué me inspiró a convertirme en “monje.” La respuesta abreviada es que pensé que Dios me había llamado a vivir una vida sencilla en comunidad, con una concentración especial en la oración y la liturgia. También me sentí atraído por el seminario apostólico St. Meinrad.
Morgan preguntó lo siguiente: “¿Qué tipo de emociones experimenta a medida que se acerca este evento tan importante [mi aniversario de oro]?” ¡En verdad me parece increíble que hayan pasado 50 años! Mi sentimiento fundamental es de agradecimiento gozoso hacia Dios por estar a mi lado todos estos años.
Spencer preguntó: “¿Alguna vez tuvo algún problema en su camino hacia el sacerdocio?” Como puede sucederle a cualquier seminarista, hubo algunas dificultades a lo largo del sendero. Y se trató de un proceso gradual que me llevó a descubrir que esto era realmente lo que Dios quería que hiciera. Recibí mucha ayuda de parte de sacerdotes y otros amigos. Me ordené como sacerdote en 1964 y serlo es una dádiva excepcional.
Michael y Spencer observaron en mis datos biográficos que había sido un Niño Explorador. Michael escribió: “Además es un excelente modelo a seguir porque fue un Niño Explorador que llegó al rango de Águila. En este momento soy principiante en la Tropa 227, en la patrulla phoenix.”
Spencer formuló la siguiente pregunta: “¿Cuál fue una de las actividades que realizó antes de convertirse en Explorador Águila?” Durante un verano ayudé a preparar el local de nuestro campamento de verano, y a limpiar y montar las carpas.
Lizzie comentó sobre el hecho de que “usted proviene de un pequeño pueblo, al igual que yo, pero demostró que, aún así, con determinación y empuje se pueden lograr grandes cosas. … Gracias por demostrar que las personas pueden hacer lo mismo durante 50 años y seguir muy contentas.”
Se me hicieron preguntas acerca del hecho de haberme convertido en el tercer obispo de Memphis.
Nick preguntó: “¿Cómo se sintió cuando eso ocurrió?” Me sentí sorprendido cuando recibí la llamada telefónica diciéndome que el Papa Juan Pablo II me había designado. Creo que me sentí conmocionado por aproximadamente seis meses.
Sydney preguntó: “¿Qué es un tercer obispo? ¿Es como ser arzobispo?” Significa que hubo dos obispos en Memphis antes que yo.
Otro Nick preguntó lo siguiente: “¿Cómo era Memphis?” “¿Le gustó?” Memphis es una hermosa ciudad sureña y la gente es muy hospitalaria. Me encantaba y me resultó difícil marcharme cuando recibí el llamado a convertirme en Arzobispo de Indianápolis. Después de sacar la cuenta, escribió: “Espero que en dos mil veinte tenga un feliz aniversario número 20 como nuestro arzobispo.”
Bethany escribió: “Ahora le tengo dos preguntas. ¿Tuvo una niñez feliz? Y, por último ¿quería ser arzobispo cuando era pequeño?” Tuve una infancia feliz. La mayoría de nuestros vecinos eran primos, así que éramos como una gran familia y hacíamos lo que hacen todos los niños. Cuando era pequeño pensé que quería ser sacerdote, pero no se me ocurrió que me convertiría en arzobispo.
Marisa hizo una pregunta parecida: “¿Pensaba en ser arzobispo cuando tenía mi edad [11-13 años]?” A decir verdad, ni siquiera me cruzó por la mente hasta el día en que recibí la llamada en 1987.
Hubo muchas preguntas acerca de ser arzobispo. Megan preguntó: “Consagración episcopal, ¿qué es eso?” Es otra forma de llamar a la ordenación como obispo. Preguntó lo siguiente: “¿Puede conocer personas especiales e importantes?” Considero que las personas como tú son importantes y especiales. Pero problemente te estás preguntando si he conocido al gobernador, al alcalde o a Peyton Manning. La respuesta es sí.
Aidan preguntó: “¿Qué tanto le ha acercado a Dios el hecho de ser arzobispo?” Todo lo que hago es para la mayor gloria de Dios y por el pueblo de Dios. Eso es un llamado constante a la santidad.
Un compañerito escribió cándidamente: “Amo a Dios con todo mi corazón. ¿Podría hacerme un favor? ¿Podría rezar por mi familia? Desde que mi abuelita murió el 80 por ciento de mi familia está deprimida. Mi esperanza está empezando a desvanecerse. Me doy cuenta de que usted nunca pierde la esperanza porque se apoya en la oración todos los días.” Para que te sientas seguro, tú y tu familia están en mi lista especial de oraciones. Recuerda: Dios te ama y es nuestra esperanza porque para Él nada es imposible. Dios te acompañará hasta el final.
Escríbeme nuevamente.
Hubo muchas preguntas acerca de mi cáncer. Ya no tengo nada y les informaré más adelante. †